Este libro me tiene obsesionado.
"Los niños del tipo de Ada son capaces de crear las más puras filosofías. Van fue considerado digno de ser iniciado en el pequeño sistema de sabiduría creado por Ada. Y en efecto lo fue, cuando apenas llevaba una semana en Ardis. Aquella filosofía presentaba la vida del ser humano como compuesta por cierto número de elementos, o cosas, clasificadas y jerarquizas: las "cosas verdaderas", poco frequentes, y de un valor inestimable; las simples "cosas" que formaban el tejido rutinario de la vida; y las "cosas fantasmas", tambien llamadas "nieblas", como el dolor de muelas, las horribles decepciones, la muerte. Si tres o cuatro acontecían simultáneamente, formaban una "torre", y, si se sucedían de manera inmediata, constituían un "puente". Las "torres verdaderas" y "puentes verdaderos" integraban la sustancia gozosa de la vida, y cuando las torres se presentaban en serie uno llegaba a experimentar el éxtasis supremo; peor eso no sucedia casi nunca. Endeterminadas circunstáncias, y a una cierta luz, una simple "cosa" podía parecer, e incluso llegar a ser, una "cosa verdadera". Y también, al contrario, podia coagularse en "niebla" fétida. Cuando la alegría y la ausencia de alegría formaban una mezcla (...) el resultado era una "torre en ruinas" o un "puente roto".
(...)
Ella le contempló langidamente. Una gotita de color de fuego le contempló igualmente, de la comisura de sus labios. Y una violeta de terciopelo tricolor, que Ada había copiado la víspera de una acuarela , le contempló también, desde su copa de cristal.
Ada no dijo nada. Se pasó la lengua por los dedos abiertos, sin dejar de contemplarle.
Van, al no obtener respuesta, se alejó del balcón. Ada vió cómo su torre se derrumbaba suavemente en el silencio del sol.
Extraido de Ada o el ardor, de Vladimir Nabokov.
Escrito por salivazo a las 29 de Enero 2005 a las 07:44 PM