No creo en el tarot, aunque me parece un buen ejercicio de proyección. Pero últimamente se me estan mezclando cartas en mi vida. Primero fue Le Mat, con la que todavia tengo que resolver muchas cosas este verano, espero. Y ahora es el turno de Le Iugement. Si siguen habiendo tantas casualidades pasaré a creer en las causalidades.